Las excusas no perdonan…
En mitad de algo frío,
sueño lana,
tengo algo que no reflejan las baldosas,
no me cuentan tu pasado,
a lo que no son a otro rato encerrado
sueñan y me acercan, parpadean tus nombres.
Se destilan perlas, gotean deformes donde debo estar parado.
Se adelanta en el suelo
el poso de un pasado inmóvil. ( Solo a ti te lo cuento )
Nos vemos en un par días. Besos. Los hospitales «no perdonan».