Viaje a zona conflicto

Jardines vacíos, entre tanto mis manos intentando imaginar como sería tener algo más que miedo, sabor de  mentiras y ceros. Bandejas que se pasean entre medias, algunas derramadas. Picoteados hasta los ojos ajenos. Otras tan llenas que a uno le entra miedo de preguntar que llevan y, en efecto lo es, dudas es lo que contienen . Y que decir si todos las tenemos e incluso no queremos saber si algo hará temblar  lo que ya creemos saber, la cara B de una mentira que a conseguido hacernos felices tanto tiempo que nos acostumbramos a ese tipo de ayuda con toda su hipocresía y masoquismo. El estómago se nos ha hecho a ver ciertas necedades.

 Partidas injustas con la realidad,  partes que creemos abusivas en nuestras vidas y, cambiamos contra la almohada, hasta que algún cretino las confunda con alguna otra y, nos quede mas remedio que aceptar que debemos alzar la cabeza y, movernos por nuestra cuenta  congeladas las riendas de nuestros fracasos, o ahogarnos en piscinas infantiles nosotros mismos.

Poetas de calles desiertas, suelos sin escritos que se llenan  de huellas con miles de historias, todas contradichas entre ellas. Hasta  que aprendamos a ver la salida. Problemas con manitas de bebe y cabezas a rosca que en su fondo agonizan, de lejos no me queda más remedios que confunde los muertos  y las zonas de carne deshechas. En papel de aluminio encerradas, tus cenizas. No tengo donde guardarte, ni siquiera mi memoria, ni en la de otros, que preferirían que no hubieras vuelto.

Problemas adyacentes, delitos prolongados por años. Mangas cortadas donde escondes trucos pasado de moda, papeles hechos añicos. Sitios y viudas que no van a poner el más mínimo empeño, en tu memoria. Tinta gastada antes de tiempo. Cada vez que te paseabas  por fuera  había quien te confundía con un fantasma, . No existían demasiadas diferencias. Los chicos me murmuran frases sin sentido a la oreja.

A los dos o tres días  empieza a cambiar de dirección. Nos expresamos como nos sentimos, tal vez por eso tu voz sea tan incorpórea .Miles de sitios donde ver por donde te dabas paseos antes de tu vueltas y , nadie acertó  que el sitio indicado sería una matanza de almas. Para que morir solo, cuando uno se encuentra solo, dolido o deshecho. Alguien te acompaña y te odia. No es tan diferente de aquell0,del resto de cualquier día a día.